Fernando Torres Millán
KairEd (Colombia)
Estas montañas nuestras
abiertas a todos los vientos
revelándome fuego adentro:
amor eficaz que salva la vida
a contraviento!
Camilo Torres Restrepo nació “pegado” a las montañas andinas orientales de Bogotá donde éstas se abren a los vientos que transitan entre los llanos orientales y el altiplano central cundiboyacense. Este corredor de vientos es el mismo que recorrió el ejército de emancipación bolivariana desde los llanos de Venezuela hasta el puente de Boyacá y por el cual logró caer de improvisto y entre las nieblas de los páramos sobre los destacamentos españoles derrotándolos contundentemente el 7 de agosto de 1819, sellando con este triunfo la primera independencia de lo que después se llamó “Colombia”.
Unos años antes –en 1780-, el corredor de emancipación había sido lugar de articulación de la insurrección comunera de familias tabacaleras y cacaoteras santandereanas contra el oprobioso régimen tributario-esclavista de los Borbones bajo la conducción del líder rebelde José Antonio Galán y su grito aglutinador “Unión de los oprimidos contra los opresores!”.
La campaña libertadora bolivariana y la insurrección comunera son ese fuego de rebeldía, resistencia y liberación que desde lo profundo de las montañas, los vientos y los pueblos atizó el llamado del padre Camilo para encender el espíritu del amor eficaz “que salva la vida a contraviento!”. Paradójico…estas mismas montañas, hoy amenazadas de muerte por los megaproyectos minero-energéticos, llevan en sus entrañas el germen que las libera, tal como lo están revelando, entre muchas otras expresiones, los comités ambientales juveniles y campesinos que hoy –con las consultas populares- gestan nuevos corredores de resistencia a contraviento!
Estas montañas nuestras
cargadas de pumas en rebeldía
revelándome refugios secretos:
amor eficaz que en ruta la vida
en contravía!
Camilo Torres teje desde su niñez una relación especialmente profunda con los llanos del Casanare donde su familia posee una finca denominada “El Puma” en honor a los míticos felinos abundantes en la región. Algunas de sus vacaciones escolares las pasará allí compartiendo con familias campesinas que le enseñaron – entre mitos, cantos y leyendas – el mundo ancho, abierto y rebelde del pueblo llanero. No es por casualidad que el periódico estudiantil que fundara en la secundaria de la Quinta Mutis llevara por nombre “El Puma”, en donde plasmará sus primeras páginas de protesta e inconformidad juvenil contra las injusticias de la institución educativa. Que cuando toma la decisión de dejar sus estudios de derecho en la Universidad Nacional para entrar a la vida religiosa en la Orden de los Predicadores (padres dominicos), lo hace después de pasar algunos días de “retiro” en la inmensidad de los llanos de “El Puma”. Lo mismo va a suceder, cuando en octubre de 1965, decide –acosado por la represión oficial y convencido de la necesaria vía armada- dejar la vida pública del Frente Unido para asumir la vida guerrillera en las montañas de Santander.
Después del asesinato del líder popular Jorge Eliécer Gaitán el 9 de abril de 1948 en la céntrica carrera séptima de Bogotá, el régimen conservador imperante desata una tenaz persecución contra el gaitanismo, la que se acrecentará con la llegada al poder del líder falangista Laureano Gómez en 1950. Bajo su auspicio surgen las bandas armadas “chulavitas” de extrema derecha que se desplazarán al Casanare para hacer frente a las guerrillas liberales en resistencia bajo la conducción del líder llanero Guadalupe Salcedo. Desde Orocué (Casanare), de donde era oriundo Guadalupe, “manadas de pumas” recorren los llanos juntando rebeldías, resistencias y libertades. Memorias recientes de estas gestas aportarán las familias llaneras al proyecto de paz que iniciarán con Camilo Torres diez años después -1964- la “Unidad de Acción Rural de Yopal” UARY, cooperativa de formación y producción campesina inspiradora de otros proyectos similares en el país, para impulsar la reforma agraria; a la postre bloqueada por el gobierno del conservador Guillermo León Valencia (1962-1966), quien en lugar de crear cooperativas campesinas se dedicará a bombardear al campesinado rebelde de de Marquetalia (sur del Tolima) y Riochiquito (Cauca), con quienes Camilo había soñado crear muchas más unidades de acción rural para la paz…
El amor eficaz, como sueño de un campesinado restaurado, redimido y reconciliado, junto a su tierra, su cultura, su familia, su libertad… tendrá en “El Puma” y en las “Unidades de Acción Rural”, referentes de identidad y de dignidad como “refugios secretos” que en rutan la vida en contravía! Otros refugios de paz indígena-campesina, como aquellos, luchan hoy en contravía, la posibilidad de re-existir…en comunidad, en minga, en tierra sagrada, sanada y liberada!
Estas montañas nuestras
cubiertas de cóndores en vuelo
revelándome retazos de cielo:
amor eficaz que cuida la vida
en desvelo!
Desde los picos más altos y escarpados de las montañas donde habitan, cóndores andinos levantan vuelo, recorren territorios, divisan sus posibilidades de caza y carroña, abrigan con sus alas el universo y aproximan “retazos de cielo” a la humanidad. Qué mejor metáfora para describir el breve, luminoso y alto vuelo del padre Camilo Torres en pos de su más preciado tesoro: construir la unidad de la clase popular a partir de la riqueza de su diversidad y pluralidad con el único fin de formar una sociedad cimentada en el amor al prójimo capaz de desvelarse en el cuidado, protección y defensa de la vida como bien común de la humanidad.
La unidad de las mayorías sociales como propósito recurrente a lo largo de la vida de Camilo, se expresará quizá por primera vez, en el Círculo de Estudios Sociales que fundara junto a su colega Gustavo Pérez Ramírez en el Seminario Mayor de Bogotá, para estudiar los problemas sociales del país y la doctrina social católica; asuntos cruciales que podrían ayudar a unir a la sociedad colombiana sumergida en la violencia liberal-conservadora incrementada después del asesinato de Jorge Eliécer Gaitán. En la Universidad Católica de Lovaina (Bélgica) –meca del catolicismo social- donde irá a estudiar sociología después de ordenarse como sacerdote en 1954, vivirá experiencias de gran calado ecuménico que marcarán su opción sacerdotal por la unidad en la diversidad y la pluralidad: El Colegio Latinoamericano de los obispos belgas, donde se alojarán jóvenes sacerdotes que se forman para trabajar en América Latina; la Maison Saint Jean – casa internacional de huéspedes de diversas religiones y culturas del mundo, el movimiento de los sacerdotes obreros de Bélgica y Francia construyendo puentes entre iglesia y sindicatos comunistas, las fraternidades contemplativas de Charles de Foucauld insertas “en el corazón de las masas”, los Equipos Colombianos de Investigación Socio-Económica que superan en el exterior la polarización partidista para trabajar frente a los problemas sociales del país, la gira junto con su amigo de infancia Luis Villar Borda por los países de Europa del Este…sin duda, alto vuelo que amplía la mirada y ensancha el corazón!
Su tesis sociológica sobre la pobreza en Bogotá lo ubicará en un lugar social excepcional para el encuentro, el dialogo, la unidad y el compromiso. Es el talante que va a desarrollar como capellán auxiliar y como profesor de sociología de la Universidad Nacional de Colombia a partir de 1959. Nace la comunidad ecuménica de universitarios para la lectura del evangelio y la transformación social. Funda el Movimiento Universitario y Profesional de Promoción de la Comunidad –MUNIPROC- en el barrio Tunjuelito al sur de Bogotá articulando el saber académico con el saber comunitario. Participa en la elaboración de la Plataforma de la Acción Comunal con el fin de aunar capacidades y formar liderazgos para superar las desigualdades. Trabaja en el Instituto Colombiano para la Reforma Agraria –INCORA- confrontando el latifundio y fortaleciendo al campesinado sin tierra. Ayuda a crear la Escuela Superior de Administración Pública – ESAP – en un horizonte de servicio y trabajo social con la comunidad. Elabora la plataforma para un Frente Unido del Pueblo con el fin de unificar en objetivos concretos a los más diversos y amplios sectores populares, para superar todo lo que divide y fortalecer todo lo que une. Emprende y alienta un movimiento de educación popular a través del periódico “Frente Unido” y de los comandos de no-alineados con miras a la formación de quienes asumirían la conducción de la revolución colombiana.
Una incipiente colcha multicolor de “retazos de cielo” quedó grabada en la memoria de generaciones juveniles como referente del amor sincero y eficaz que cóndores en vuelo, a la manera de Camilo, continúan hoy, convocando y abrigando pueblo para el cuidado y defensa de toda vida en desvelo!
Estas montañas nuestras
húmedas de sudor y danzares
revelándome rugir de tambores:
amor eficaz que transforma la vida
en sentipensares!
Las hicoteas cienagueras saben muy bien que en tiempos de sequía deben enterrarse y dormitar y en tiempos de lluvia salir, aparear y desovar de tal manera que el ciclo de la vida se sostiene y se reproduce. Así mismo los pueblos cienagueros y ribereños –húmedos de sudor y danzares- resisten y superan las adversidades combinando el pensar y el sentir, la cabeza y el corazón, el aguantar y el disfrutar propio de culturas anfibias milenarias. Hombres y mujeres hicoteas entreveran la vida con la maña del sentipensar afro-indígena ante la violencia del latifundio y el narcotráfico costeño pretendiendo el desalojo, el desplazamiento y la ocupación. El pueblo anfibio ha creado el melódico rugir de tambores llamando a la cumbiamba de sentipensares que lo manifiesta digno y autónomo, alegre y rebelde, diverso y unido.
Amor eficaz que transforma la vida en tejido de sentipensares, resultado de rupturas contrahegemónicas y contraculturales, es revelado como un evangelio de amor eficaz que en Camilo se hizo vida profética y relato impugnador. Ruptura política cuando convoca a la constitución de un Frente Unido por parte de estudiantes, campesinos, obreros, indígenas, profesionales, militares, familias, desempleados, mujeres, cooperativas, juntas de acción comunal a fin de establecer- mediante una revolución- una sociedad que esté orientada por el amor al prójimo. Una ruptura epistemológica al vincular estudiantes y profesores de la Universidad Nacional con las comunidades barriales del sur de Bogotá a fin de generar procesos investigativos que lleven a la acción comunal promotora del desarrollo integral y la formación de sus dirigencias. Una ruptura teológica de la eficacia de los sacramentos y del culto externo a la eficacia del amor al prójimo como esencia del cristianismo. Una ruptura ecuménica que lleva a insistir en todo lo que une y a prescindir de todo aquello que separa con lo cual las fronteras del encuentro, el dialogo y la comunión se amplían y se abren a la acogida, el respeto y la interacción.
Rugir de tambores hoy por doquier anunciando nuevas rupturas de amor eficaz en proceso: ruptura del paradigma económico extractivista y desarrollista por una economía del cuidado y del buen vivir, ruptura del paradigma de la sexualidad binaria por otra incluyente de la diversidad, la transitoriedad y la transgresión sexual, ruptura del paradigma capitalista patriarcal de sociedad por alternativas comunitarias de la equidad y la solidaridad inter-géneros, ruptura de una epistemología pretendidamente universal por epistemologías “otras” configuradoras de saberes propios, complejos y diversos en dialogo transfronterizo, ruptura de una espiritualidad de cristianismo imperializado hacia espiritualidades conectoras de lo trascendente con las inmanencias de la tierra, del cuerpo, de las relaciones, del arte, de las ancestralidades; ruptura del vanguardismo y autoritarismo militar de las insurgencias guerrilleras hacia alternativas comunitarias de vida en redes de no-violencia, perdón y reconciliación.
Una generación sentipensante “capaz de pensar sintiendo y sentir pensando”, discípula de Camilo Torres, Orlando Fals Borda y María Cristina Salazar, construyen hoy, contra toda avalancha de muerte institucionalizada- el sueño profético isaiano: “Forjarán de sus espadas azadones, y de sus lanzas podaderas. No levantará la espada nación contra nación, ni se ejercitarán más en la guerra” (Is 2.4)
Ibagué, 7 de agosto de 2018